Avenida de la Ciencia

S.XVIII

Mucha «culpa» la tuvo el terremoto de Lisboa, los pensadores se vieron en la necesidad de salir de la oscuridad de la ignorancia y esta ansia de alcanzar la luz del conocimiento fue llamada ILUSTRACIÓN.

Uno de los grandes avances científicos de la época se debió a un militar español, la vacuna contra la viruela (1796)

********************************************************************************

La conexión entre la Ilustración, el terremoto de Lisboa y la ciencia es fundamental para comprender cómo este evento impactó en el pensamiento del siglo XVIII.

Durante la Ilustración, la ciencia experimentó un auge significativo. La creencia en el poder de la razón humana y la observación empírica condujo a un aumento en la valoración del método científico como una herramienta para comprender y controlar el mundo natural. Figuras como Isaac Newton habían sentado las bases para una visión mecanicista y ordenada del universo, donde las leyes naturales podían ser descubiertas y entendidas por la mente humana.

El terremoto de Lisboa proporcionó a los científicos de la época un evento real para estudiar y comprender. Desencadenó un interés renovado en la geología, la sismología y la física, ya que los estudiosos buscaron explicaciones científicas para este desastre natural. Las observaciones y los informes sobre el terremoto llevaron a avances en el entendimiento de cómo se propagan las ondas sísmicas y cómo se forman los tsunamis, entre otros fenómenos.

Además, el terremoto de Lisboa planteó preguntas importantes sobre la naturaleza de la Tierra y la estabilidad de sus estructuras geológicas. Los científicos de la época se enfrentaron al desafío de explicar por qué ocurrió el terremoto y cómo podían prevenirse futuros eventos similares. Estos esfuerzos contribuyeron al desarrollo de la geología como disciplina científica y al aumento de la conciencia sobre la importancia de la preparación y la mitigación de desastres naturales.

El terremoto de Lisboa estimuló el interés y el progreso científico durante la Ilustración al proporcionar un caso de estudio real para los científicos de la época. Contribuyó al crecimiento del conocimiento en campos como la geología y la sismología, y reforzó la creencia en el poder de la razón humana y el método científico para entender y enfrentar los desafíos del mundo natural.